Por Carmen Diez Salvatierra
Mientras tanto, caminan torpemente por aquella casa cada vez más reducida, más llena de muebles y, sin querer, lo van volcando todo a su paso, sillas, estantes, vasos, cubiertos, nerviosos y excitados de saberse, aún, el uno cerca del otro. Idealizándose tanto que ambos sienten ahora vergüenza de mirarse a los ojos, y se ruborizan cada vez que esto ocurre.
Del relato «Cercanías» incluido en la obra
Silvia Sánchez Rog (Madrid, 1971) es escritora. Ha vivido en Berlín, Granada y Londres. Resultó finalista del Premio Libro de Cuentos Setenil (2007) y del Certamen Jóvenes Creadores, sección Narrativa, en 2006. En el año 2007 ganó el V Premio de Narrativa Caja Madrid, gracias al cual publicó La mujer sin memoria y otros relatos (2007). Dicha obra fue traducida al italiano a finales de 2013, y publicada en la Editorial SUI bajo el título La donna senza memoria. También ha publicado sus relatos en varias antologías y revistas, algunos de los cuales han sido traducidos al italiano y al francés.
Muchos son los análisis conferidos a la arquitectura de las relaciones urbanas en disciplinas como la sociología o la antropología. Silvia Sánchez Rog consigue extrapolar esos análisis al mundo del relato corto, y lo hace con una facilidad estimable. Las palabras van desfilando por nuestros ojos haciéndonos reflexionar acerca de las traiciones, las nostalgias o las malas compañías que se enmarcan en un espacio-tiempo que es la ciudad posmoderna. Aquella que nos hastía y nos fascina, todo al mismo tiempo.
Los personajes de Silvia tienen a veces una dulce torpeza, una obsesión excesiva; otras veces son mediocres, pero fieles reflejos de las habitantes de cualquier metrópolis, aquellxs con los que nos cruzamos a diario. Su lenguaje es claro y cotidiano; no hay largas descripciones, abundan los diálogos cortos -y cortantes- que sin embargo hacen funcionar rápidamente a nuestra imaginación y reconocernos en las emociones de lxs protagonistas. Todas las situaciones aquí descritas nos resultan irremediablemente familiares: desde los celos infundados de Quim al encontrar un desodorante que no es suyo en el baño de la casa de su novia («La solución de Quim»), hasta el enamoramiento sin palabras de dos desconocidxs en un tren de cercanías («35 kilómetros»). Cierta crítica se desprende de «Los simplicistas», el relato más breve de todos, sobre una novia que se convierte en copia de una anterior y que lleva al protagonista a la conclusión de que «todas las mujeres son una». «La meseta», por su parte, es un espléndido relato sobre el valor de la amistad entre mujeres, con la meseta española como metáfora de la distancia que a veces se crea entre dos personas. Reseñable es, sin duda, que la gran parte de las protagonistas de los relatos de Silvia sean mujeres.
En definitiva, es esta una obra ideal para acompañarnos en los trayectos diarios en transporte público, en los breves momentos de descanso entre actividad y actividad, e incluso antes de irnos a dormir. Sus breves y sencillas historias no requieren una excesiva concentración y nos atraparán al instante.
La mujer sin memoria y otros relatos está publicada en la Colección «Nueva Biblioteca» de la Editorial Lengua de Trapo