‘Shrill: Notas de una mujer ruidosa’, de Lindy West, un alegato contra la gordofobia y los trolls

Observé a mis amigas convertirse en seres delgados y hermosos. Las observé ser elegidas y vestirse con ropa de J.Crew y entrar en botes pequeños sin miedo de que volcasen, pero también las vi morirse de hambre y hacerse daño a sí mismas, perderse y naufragar. Fueron escogidas por malas personas, por gente que las dañó a propósito, que erosionó su autoestima, y las mantuvo atrapadas en una búsqueda sin fin. La verdadera estafa es que estar en los huesos tampoco es suficiente. El juego está amañado. No existe la perfección

Queridas lectoras y lectores ahí fuera: esta reseña no va a ser objetiva – ¿de verdad existen las críticas de arte objetivas? – porque la realidad es que adoro a Lindy West. Adoro que cada vez que la leo mi autoestima se multiplique. Adoro que me haga sentir ganas de ir a internet y meterme en peleas cibernéticas con todos y cada uno de los trolls que la hicieron irse de Twitter. Esta mujer es una de las principales razones de que la gordofobia esté presente en medios de comunicación de masas comoPortada The Guardian y cada uno de sus artículos es una genialidad. Vale, a lo mejor no todos. Pero no importa, porque merece la pena leerla por los que sí lo son.

‘Shrill’ recopila algunos de estos artículos, con temas que van desde la percepción social del aborto, hasta el abuso que las personas de una cierta talla sufren en los aviones. West no solo retrata situaciones sociales en las que personas que no cumplen un determinado ideal de belleza son atacadas y menospreciadas, sino que se pone ahí fuera, se expone al odio irracional que muchas veces invade internet y las redes sociales, haciéndolos un espacio hostil para grupos como las mujeres.

Estos temas también tienen cabida en las páginas de West, que pone de relieve la fina línea entre libertad de expresión y discursos de odio, no solo en internet, pero en espacios como las comedias en vivo –un arte muy popular en los Estados Unidos.

Sin embargo, destacan especialmente sus artículos sobre imagen corporal, en los que West reflexiona sobre la presión sobre las mujeres para comprimir el espacio físico que ocupamos, reduciéndonos a prácticamente la mínima expresión.

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Lindy West, fotografiada por Dot Richards

El poder que se ejerce sobre los miembros del sexo femenino en este ámbito, no se reduce a la simple presión de las mujeres a estar delgadas por un ideal de belleza. La reducción física viene acompañada de la expectación de silencio. Cuando los trolls insultan a West por su aspecto físico, lo hacen porque creen que tienen el poder de decir a las mujeres que no pertenecemos en espacios públicos si no somos de una cierta manera, la manera que ellos han decidido. El problema es que conseguir que Lindy West se haya ido de Twitter no los ha hecho ganar una guerra. Queridos trolls ahí fuera, estamos aquí y vamos a quedarnos.

Lindy West (Seattle, 1982) es una escritora estadounidense que se centra en la cultura pop. Destacan sus artículos basados en feminismo e imagen corporal. West ha escrito en medios tan importantes como The Guardian o el portal feminista Jezebel.com. ‘Shrill: Notas de una mujer ruidosa’, una compilación de algunos de sus mejores artículos, es su primer libro en solitario.

Hacia una nueva sentimentalidad: Lo demás, de Robin Myers

Paso mucho tiempo acorazada en los subterráneos. En los trayectos diarios bajo tierra descubro a Robin Myers, sin duda uno de esos momentos propicios para acercarme a una nueva sentimentalidad poética: la que da justo en el blanco de los corazones raídos pero vivos, la imagen justa de la portada de esta edición de Kriller71: café, frutas, galletas y un color muy blues en la composición. La vida cotidiana atravesada por la lucidez de la lucha.

Los poemas de Myers me atraviesan: quizá porque acabo de despertarme, porque el pelo me huele todavía a mango, porque soy una esponjita que va absorbiendo sus palabras, sus versos. Me doy cuenta de que cuando encuentro poemas tan particulares, tan nítidos, tan certeros y sensibles, apenas puedo explicar mucho más: Lo demás es una antología que habla por sí sola. Se nutre de la vida, de esa vida desplazada, de esos tactos milagrosos, de esa incomunicación latente que nos atraviesa todas y a cada una de nosotras, de nosotros.

El pequeño libro se abre con una pregunta: «¿De qué se trata en realidad, esta necesidad (…) de abrirse paso a fuerza de metáforas (…)?». De un lado, interrogantes devastadores. De otro, la realidad como fuente de trabajo poético. No parece nada nuevo, y sin embargo algo me induce a pensar que estoy frente a poemas terriblemente lúcidos, y digo terriblemente porque la lucidez siempre lo acaba siendo. «Yo, si pudiera, viviría de un fogonazo cegador a otro, si aquello no entrañara alguna forma de desesperanza (…)».

Pero, ¿de qué nos habla la poesía de Myers?  Ella escribe: «Todo contacto es un obstáculo.». Y narra esos obstáculos. Y, al mismo tiempo, va creando historias. Historias-poema sobre cómo ella es capaz de tocar, o no. Sobre cómo oponernos, cómo luchar. Sobre la vida como lucha suprema. No ya solo por la supervivencia. Sino por la comunicación.

Se la pasan hablando de que el mundo está roto,
¿pero acaso no está riesgosamente entero,
aunque amenace siempre con quebrarse?

los muchachos que están despatarrados y apiñados
sobre los escalones del colectivo en movimiento,
los estantes colmados, los aviones
grávidos, el pavimento solamente un modo de endurecer la piel
de la cosa, la cosa,
el aro un mero adorno
de la barrera, los grafitis tan sólo un comentario
acerca de la piedra, los meniscos de la leche
apenas un intento por imitar la olla que se calienta al fuego.

¿Dónde está el fin?
¿Qué va a ser necesario para ablandar las superficies?
¿Para quebrar los bordes?
¿Vas a ayudarme en algo?

Tomamos la cerveza del pico, derramamos
encima de la mesa espuma, que deja una película insignificante,
nos movemos rozando el mimbre de las sillas,
chocamos las rodillas mientras aguardan nuestros huesos
en la cálida vaina de sus jeans.

Los limones,
cortados por sus vientres
y puestos en un bol,
son la única genuina violación del día.

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Lo demás apareció a finales de 2016 en Kriller71 Ediciones


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*fotografía de Bekriah Mawasi

Robin Myers (Nueva York, 1987) es traductora y poeta. Licenciada en Letras Inglesas por parte del Swarthmore College (EE.UU.) Estudió la poesía de América Latina y su traducción en Buenos Aires y actualmente reside en la Ciudad de México. Fue nombrada Fellow of the American Literary Translators Association (ALTA) en 2009. Lo demás es su primer libro de poemas traducido al español.

“Mujeres difíciles” -y rotas, y dependientes, y espabiladas, y fuertes- de Roxane Gay

Nosotras fuimos jóvenes una vez y después ya no lo éramos.

El señor Peter condujo durante un largo tiempo. Nosotras éramos tan pequeñas y estábamos tan asustadas. Eso fue suficiente para mantenernos calladas. Cuando paramos, estábamos en un lugar que no conocíamos”.

La recopilación de historias de Roxane Gay empieza y acaba con los dos mejores relatos que leeremos en este libro. El primero de ellos se quedó conmigo durante días. Mientras trabajaba, volvía a recordar la historia de una de esas mujeres difíciles de Gay y me estremecía. El último es una historia que, según descubrí al terminar el libro, está basada en la vida de la autora.

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La escritora Roxane Gay

En las páginas de ‘Mujeres difíciles’, las mujeres del título viven en circunstancias muy diferentes. Algunas de ellas están atrapadas en trabajos míseros que no les dejan vivir, otras tienen vidas acomodadas y maridos que les proporcionan todo lo necesario para no tener que trabajar, o son mujeres independientes con posiciones como investigadoras en pueblos perdidos del norte estadounidense.

Milly es gorda y fea, pero hace buenas mamadas, así que es raro que duerma sola, lo que no significa que no se sienta sola. De hecho, Milly no es fea, pero es como si lo fuera. Tiene una cara bonita, lo que es lo mismo que ser fea cuando una mujer es gorda

Lo terrible de las vidas de los personajes femeninos de la novela es que siempre están condicionadas por hombres. En su mayoría parejas, pero también desconocidos. Incluso cuando las mujeres están enamoradas de otras mujeres, su vida es compartida con hombres.

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Esto me supuso un dilema a la hora de reseñar el libro. No podía decidir si me gustaba o no. Las historias de Gay son cautivadoras, te hacen pensar acerca del mundo y quieres seguir leyéndolas hasta descubrir qué pasará con sus personajes. Pero había una parte de mí que echaba de menos historias de mujeres cuyas vidas estuviesen influenciadas por algo más que esas relaciones de pareja imposibles.

Luego me di cuenta de que las historias de Gay son más comunes de lo que nos gustaría admitir. E incluso si no lo fuesen, no tendría importancia. El libro de Gay no describe a todos los tipos de mujeres, pero esa no es la responsabilidad de la autora. ‘Mujeres difíciles’ nos hace pensar en nuestro rol en el mundo, en el rol de todos esos personajes cuyas decisiones muchas veces no entendemos. Y si, no nos describe a todas, pero describe a algunas de nosotras, negras, latinas, lesbianas, rotas y difíciles, y plasmando sus historias en un libro que parece destinado a convertirse en un éxito de ventas, hace que el mundo sea un poco más nuestro.

Roxane Gay, nacida en Nebraska, Estados Unidos, en 1974, es una autora de novelas y articulista de opinión para el prestigioso New York Times. Conocida mundialmente por su recopilación de ensayos “Bad Feminist”, Gay es una sobreviviente de violencia sexual, lo que se refleja en algunos de sus ensayos e historias de ficción, y una activista por la visualización de los escritores de raza negra en los Estados Unidos.

Difficult Women‘ ha sido publicado en inglés en 2017 por la editorial Grove Atlantic.

‘Fuera de Quicio’, conexiones entre hermanas por Karen Joy Fowler

En la mayoría de las familias, hay un hijo favorito. Los padres lo niegan y a lo mejor ni siquiera lo ven, pero es obvio para los niños. Las injusticias molestan enormemente a los niños. Es duro ser siempre el segundo.

También es duro ser el favorito. Merecido o no, ser el favorito es algo molesto

La primera cosa que debe ser advertida antes de que la lectora empiece a leer esta reseña es que Fuera de Quicio tiene un secreto que no puede ser revelado. Tengo un amigo que me confesó una vez que siempre lee la última página de un libro antes de terminar. Ya sea al empezar, o cuando está por el medio, pero no puede aguantar las ganas de saber qué es lo que va a pasar con los personajes. Otra de mis amigas hace lo mismo, y dice que es un acto que no hace menos placentera la lectura de los hechos anteriores a este final.

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Esto no va a funcionar con Fuera de Quicio. Es necesario que empecemos el libro ciegos a lo que va a ocurrir alrededor de la página 80. Es absolutamente necesario, porque si no, no seremos capaces de entender nada de lo que la autora intenta transmitirnos. Yo misma voy a intentar no desvelar nada de los hechos de Fuera de Quicio, pero también considero necesario advertir de que debéis leer esta reseña bajo vuestra propia responsabilidad.

El libro de Fowler es una de esas obras cuyo título traducido al español no hace justicia a la novela. Para ser honesta, el título me recuerda a una de esas películas de la saga American Pie, que reproduce rancios estereotipos adolescentes. Pero el único parecido con esta novela es que la protagonista se encuentra en la universidad al inicio de la novela. Así, la historia se centra en Rosemary, que no habla mucho, y partiendo desde un primer incidente que envuelve a la policía, nos desvela la historia de su particular familia. Fuera de Quicio es una historia de mujeres improbables, envueltas en circunstancias que van más allá de su control e intentado dar sentido a un mundo que va en su contra.

Busqué a través de mi cansancio, en cada respiración, en cada músculo, en cada latido, y encontré una certeza reconfortante, que iba hasta los huesos. Yo amaba a Fern. Yo siempre había amado a Fern. Yo siempre lo haría (…) Pero, desde que podía recordar, también había tenido celos de ella. Había tenido celos hacía menos de quince minutos, cuando descubrí que Lowell la había visitado a ella y no a mí. Pero a lo mejor esta es la manera en la que las hermanas se sienten normalmente

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Karen Joy Fowler, fotografiada por Beth Gwinn

Las heroínas de la novela son un ejemplo descorazonador de las relaciones entre hermanas y de cómo nuestra sociedad valora de manera diferente nuestras vidas, categorizándonos en diferentes grupos y decidiendo qué es correcto para nosotras o qué no, en base a características que escapan totalmente a nuestro control. La hipocresía de este mundo y la lucha de Rosemary para mantenerse a flote harán replantearse su forma de vida a todo aquel lector o lectora que llegue al final de esta novela.

Nosotras no somos Rosemary, y no somos Fern, pero ellas son cada una de nosotras, cada vez que hemos estado atrapadas en circunstancias injustas, ellas representan la desesperación de una vida escogida por gente totalmente ajena a sus circunstancias. El mensaje del libro, imposible de desvelar sin recurrir a los temidos spoilers, se quedará con vosotros mucho después de haber cerrado la última página. Esta es una de esas novelas que se comentan mucho tiempo después cuando, tras meses de volver mentalmente a ella en los momentos muertos en las colas del tren, o esperando en la fila del supermercado, nos damos cuenta del impacto que han tenido en nosotros, y empezamos a mirar otras vidas como lo que realmente son.

En definitiva: altamente recomendable si no tenemos miedo de empezar a mirar al mundo por lo que realmente es.

Fuera de Quicio fue publicada en español por Malpaso Ediciones (advertencia: la descripción proporcionada por Malpaso Ediciones contiene spoilers).

BIOGRAFÍA

Karen Joy Fowler es una autora americana cuyas obras se centran frecuentemente en las vidas de mujeres y en cómo estas afrontan el mundo. Nacida en Indiana, su padre era un psicólogo centrado en investigar el comportamiento animal. Graduada por la universidad de Berkeley en Ciencias Políticas, durante su tiempo en la universidad fue una activista en contra de la guerra, interesada en India, Gandhi y el imperialismo.